Derivas Urbanas

Derivas Urbanas
“Caminar no nos lleva en principio a ninguna parte luego nos permite llegar a cualquier lugar.”

12 feb 2013

Joseph K y la cartografías del habitar

Proyectos 2CT.
El arte es un deporte de combate
(La sociología es un deporte de combate, Pierre Bourdieu)

Como afirma Pierre Bourdieu, "el papel de la arquitectura no se discute, se da por sentado" el como afecta la confuguración del espacio ciudadano a los comportamientos de sus habitantes no se cuestiona y esta aparente invisibilidad crítica es lo que la dota de un poder tremendamente eficaz "los efectos ideológicos de mayor éxito son aquellos que carecen de palabras y no demandan más que un silencio cómplice" escribe Bourdieu.
http://pierre-bourdieu.blogspot.com.es/


Espacio social y prácticas sociales según Pierre Bourdieu.  
Bourdieu, Pierre. Raisons pratiques. París: Seuil, coll. Points, 1996, p. 21

proyectos talla S  
1. Joseph K  y la cartografías del habitar:



Para J.G. Ballard,  "La ciencia-ficción debe interesarse por el aquí y ahora, no por el lejano futuro sino por el presente, no por los alienígenas sino por lo que está ocurriendo en el mundo."
Walter Benjamin en "Imaginación y sociedad" describe la novela de Kafka como "Experiencia del hombre moderno en la gran ciudad (...) del ciudadano del estado moderno, que se sabe entregado a un inabarcable aparato burocrático, cuyas funciones dirigen instancias no demasiado precisas para los órganos que las cumplen, cuanto menos para los que están sujetos a ellas"

A partir de la obra de Franz Kazka: El Proceso y su adaptación al cine por Orson Welles en 1962, analizaremos algunos problemas actuales referidos a la ciudad y sus escalas, a los vacíos y a las aglomeraciones, a lo repetitivo y a lo único.




Como punto de partida trabajeremos con y en el anillo de circunvalación M40 de Madrid.

Caracterización de la ciudad contemporánea:

1: La ciudad dormitorio: módulos repetitivos, techos bajos, estancias pequeñas, etc
2 semanas
2. Las estructuras del poder, sedes de grandes corporaciones, edificios administrativos, etc
2 semanas
3. Calles / anillos de circunvalación: estaciones, aeropuertos, transbordadores e intercambiadores, etc
2 semanas
4. Arquitectura del consumo, o las nuevas cárceles: Grandes Centros  Comerciales. "Ya no estás encerrado, estás endeudado" "Compro, luego existo" Barbara Kruger
2 semanas
Metodologías:
Mapeos, documentación fotográfica y audiovisual, relatos y archivos, usos y tipologías del suelo y edificios, clases y tipos de habitantes, deconstrucción de los discursos del consumo, medios de representación de masas, etc.

Link a página Urban Drifts como os comenté tiene una buena estructura de proyecto.
Link a web de Juan Freire tiene textos y reflexiones interesantes sobre las problemáticas de la ciudad contemporánea









Para Cortázar, construir puentes significa conciliar los extremos, buscar con ansiedad un lugar propio, experimentar la nostalgia y la pérdida como nuevos rumbos para estimular el crecimiento personal.
"Porque un puente, aunque se tenga el deseo de tenderlo y toda obra sea un puente hacia y desde algo, no es verdaderamente puente mientras los hombres no lo crucen. Un puente es un hombre cruzando un puente."
Julio Cortázar, Libro de Manuel, p. 27.
"No me importa quién haga las leyes de un pueblo si yo puedo escribir sus baladas" decía Borges y eso me recuerda la película Seis grados de separación, cuando el protagonista Will Smith explica la importancia de la imaginación a sus anfiriones, marchantes de arte neoyorkinos, en base a una explicación implícita en el libro de J.D. Salinger "El guardián entre el centeno"
Conexiones, relaciones, procesos de reubicación de lo ya conocido:

Fragmento del diálogo de Will Smith:
-Un profesor suplente en Long Island fue despedido de su trabajo por pelearse con un alumno. Algunas semanas después, regresó al aula, disparó al estudiante, sin éxito, tomó como rehenes a toda la clase, y luego se disparó, esta vez con éxito. Este hecho me llamó la atención. La última frase en el Times, en la que un vecino describía al profesor como un buen chico, siempre estaba leyendo El Guardián entre el Centeno. Ese cretino de Chapman, el que asesinó a John Lennon, confesó que lo hizo porque quería llamar la atención del mundo hacia El Guardián entre el Centeno, y que la lectura de este libro sería su defensa. John Hinckley, el loco que disparó contra Ronald Reagan y su secretario de prensa, dijo que para conocer su defensa lo único necesario era leer El Guardián entre el Centeno. Le pedí prestada una copia a una amiga mía porque quería saber lo que había subrayado. Y leí este libro para descubrir por qué esta conmovedora, hermosa y sensible historia publicada en julio de 1951, se había convertido en este manifiesto de odio.
Empecé a leerla, y era exactamente tal como la recordaba. Todos los personajes son unos farsantes. Página dos: "Mi hermano está en Hollywood prostituyéndose". Página tres: "¡Qué patán tan pretencioso era su padre!". Página nueve: "La gente nunca se da cuenta de nada". Luego, en la página 23, se me pusieron los pelos de punta. ¿Recuerdan a Holden Caulfield, el arquetipo de joven sensible, con su gorra roja de cazador? ¿una gorra para la caza del ciervo? "Qué te lo has creído. Me la quité y la miré con un ojo cerrado, como si estuviera afinando la puntería. Es una gorra para cazar gente. Yo me la pongo para matar gente". Este libro prepara a la gente para vivir una vida como jamás hubieran soñado. Y en la página 99: "Preferiría tirar a un tío por la ventana, o cortarle la cabeza a hachazos, que pegarle un puñetazo en la mandíbula. Me revientan las peleas a puñetazos, lo que más me asusta es ver la cara del otro tío".

Me terminé el libro, y es una historia conmovedora; es cómica, en el sentido de que el protagonista desea hacer tanto y no puede hacer nada. Odia toda falsedad y solo miente y miente a los demás. Desea caer bien a todos, pero resulta aborrecible y completamente egocéntrico. En otras palabras, una imagen bastante acertada de un adolescente masculino.
Pero lo que me alarmó de su lectura, no es tanto el libro en sí mismo, sino el aura que lo envuelve. El argumento del libro es primordialmente la parálisis: el chico es incapaz de funcionar. Y al final, antes de que pueda huir y empezar una nueva vida, comienza a llover, y se derrumba. Bueno, no tiene nada de malo escribir sobre la parálisis emocional e intelectual. Puede que incluso, gracias a Chejov y a Samuel Beckett, el argumento sea bastante moderno. Las extraordinarias últimas líneas de Esperando a Godot: "Adelante. Sí, adelante". Indicación escénica: ninguno se mueve.
Pero el aura que desprende el libro de Salinger, que debiera ser leído por todos excepto por jóvenes adolescentes, se traduce en lo siguiente: refleja con la distorsión de un espejo de un parque de atracciones y amplifica como un altavoz distorsionado una de las grandes tragedias de nuestro tiempo: la muerte de la imaginación. Porque, ¿qué otra cosa es la parálisis?

La imaginación ha sido tan degradada que, en lugar de constituir pieza fundamental de nuestra existencia, ahora se considera como algo que está fuera de nosotros mismos. Como la ciencia ficción. O para emplearla en combinar las rodajas de mandarinas con las chuletas de cerdo. Por cierto, ¡qué receta tan imaginativa! Y La Guerra de las Galaxias: ¡Cuánta imaginación! Y Star Trek: ¡Qué derroche de imaginación! Y El Señor de los Anillos, con todos esos enanos: ¡Cuánta imaginación!

La imaginación ha pasado de ser nuestro lazo más personal e íntimo, y me estoy refiriendo a una especie de vínculo de nuestro ser interior con el mundo exterior que compartimos. ¿Qué es la esquizofrenia sino el aterrador estado en el cual lo que sucede aquí dentro no coincide con lo que ocurre ahí fuera? ¿Por qué la imaginación se ha convertido en un sinónimo de estilo? Yo creo que la imaginación es el pasaporte que nosotros creamos para ayudarnos a conducirnos dentro del mundo real. Creo que la imaginación es meramente otra manera de denominar aquello que nos pertenece más íntimamente. Jung dijo: "El mayor pecado es ser inconsciente". Nuestro Holden nos dice: lo que más me asusta es ver la cara del otro tipo, no sería tan duro si ambos tuviéramos los ojos vendados. La mayoría de las veces, las caras que confrontamos no son las de los otros, sino la de nosotros mismos. Y les aseguro que es el peor tipo de cobardía: tener tanto miedo de uno mismo, que te vendas los ojos en vez de enfrentarte contigo mismo. Enfrentarnos a nosotros mismos. Eso es lo difícil. La imaginación es ese regalo de Dios que nos hace soportable el hacer examen de uno mismo.
Seis grados de separación
 
En este blog hay unas entradas interesantes sobre Satnley Milgram:


Stanley Milgram I — Obediencia


Stanley Milgram II – Seis grados de separación

Stanley Milgram III – Desconocidos familiares y otros experimentos
 

Película El Proceso Orson Welles, 1962



En El Proceso se encuentra una pequeña obra maestra, Ante la Ley, un relato que Kafka publicó de manera independiente y que aparece en medio de este texto. Es un texto muy corto, como de una hoja, y es la llave que abre y cierra el relato. Es posiblemente su creación más hermética, Orson Welles inicia su película con esta historia:

Ante la ley
Franz Kafka
Ante la ley hay un guardián. Un campesino se presenta frente a este guardián, y solicita que le permita entrar en la Ley. Pero el guardián contesta que por ahora no puede dejarlo entrar. El hombre reflexiona y pregunta si más tarde lo dejarán entrar.

-Tal vez -dice el centinela- pero no por ahora.


La puerta que da a la Ley está abierta, como de costumbre; cuando el guardián se hace a un lado, el hombre se inclina para espiar. El guardián lo ve, se sonríe y le dice:


-Si tu deseo es tan grande haz la prueba de entrar a pesar de mi prohibición. Pero recuerda que soy poderoso. Y sólo soy el último de los guardianes. Entre salón y salón también hay guardianes, cada uno más poderoso que el otro. Ya el tercer guardián es tan terrible que no puedo mirarlo siquiera.


El campesino no había previsto estas dificultades; la Ley debería ser siempre accesible para todos, piensa, pero al fijarse en el guardián, con su abrigo de pieles, su nariz grande y aguileña, su barba negra de tártaro, rala y negra, decide que le conviene más esperar. El guardián le da un escabel y le permite sentarse a un costado de la puerta.


Allí espera días y años. Intenta infinitas veces entrar y fatiga al guardián con sus súplicas. Con frecuencia el guardián conversa brevemente con él, le hace preguntas sobre su país y sobre muchas otras cosas; pero son preguntas indiferentes, como las de los grandes señores, y, finalmente siempre le repite que no puede dejarlo entrar. El hombre, que se ha provisto de muchas cosas para el viaje, sacrifica todo, por valioso que sea, para sobornar al guardián. Este acepta todo, en efecto, pero le dice:


-Lo acepto para que no creas que has omitido ningún esfuerzo.


Durante esos largos años, el hombre observa casi continuamente al guardián: se olvida de los otros y le parece que éste es el único obstáculo que lo separa de la Ley. Maldice su mala suerte, durante los primeros años audazmente y en voz alta; más tarde, a medida que envejece, sólo murmura para sí. Retorna a la infancia, y como en su cuidadosa y larga contemplación del guardián ha llegado a conocer hasta las pulgas de su cuello de piel, también suplica a las pulgas que lo ayuden y convenzan al guardián. Finalmente, su vista se debilita, y ya no sabe si realmente hay menos luz, o si sólo lo engañan sus ojos. Pero en medio de la oscuridad distingue un resplandor, que surge inextinguible de la puerta de la Ley. Ya le queda poco tiempo de vida. Antes de morir, todas las experiencias de esos largos años se confunden en su mente en una sola pregunta, que hasta ahora no ha formulado. Hace señas al guardián para que se acerque, ya que el rigor de la muerte comienza a endurecer su cuerpo. El guardián se ve obligado a agacharse mucho para hablar con él, porque la disparidad de estaturas entre ambos ha aumentado bastante con el tiempo, para desmedro del campesino.


-¿Qué quieres saber ahora? -pregunta el guardián-. Eres insaciable.


-Todos se esfuerzan por llegar a la Ley -dice el hombre-; ¿cómo es posible entonces que durante tantos años nadie más que yo pretendiera entrar?


El guardián comprende que el hombre está por morir, y para que sus desfallecientes sentidos perciban sus palabras, le dice junto al oído con voz atronadora:


-Nadie podía pretenderlo porque esta entrada era solamente para ti. Ahora voy a cerrarla.



11 feb 2013

Visita a la Sala de Arte Joven


El lunes 18 de febrero quedamos a las 18:00 en la Sala de Arte Joven con Maite Angulo para ver la exposición:
hacer en lo cotidiano 01 / Sala de Arte Joven
Inauguramos la primera exposición colectiva del proyecto "hacer en lo cotidiano", seleccionado en la IV edición del concurso "Se busca comisario" promovido por la Comunidad de Madrid.

Artistas:

Julio Adán
Maite Angulo
María Castelló Solbes
Julio Falagán
Hisae Ikenaga
Luján Marcos
Begoña Olavarrieta G.
Leonor Serrano Rivas
Luis Vassallo
Velázquez Cabrero

Comisariado por Beatriz Alonso

Partiendo de la potencialidad de transformación de lo existente defendida por Michel de Certeau, "hacer en lo cotidiano" plantea una reflexión sobre la capacidad del arte hoy en día para cuestionar nuestros territorios más cercanos y generar otras posibilidades de habitarlos.

El proyecto se organiza en torno a dos exposiciones colectivas, siete talleres de creación, presentaciones y encuentros con los artistas, un programa de mediación diseñado por Pedagogías Invisibles, y conciertos coincidiendo con la clausura de cada exposición.

Los artistas participantes en esta primera exposición nos descubren los valores políticos, poéticos y estéticos que se esconden en el día a día. Desde lo común y la experiencia compartida, sus obras destacan lo insólito en lo cotidiano, mediante poesía, ironía y humor absurdo. Una manera de llamar la atención sobre aquello que sucede a diario para replantearnos cómo estar de otro modo en la vida cotidiana.

23 dic 2012

Un fuerte abrazo

Traigo a colación una humilde declaración de principios del gran arquitecto Luis Barragán: "En proporciones alarmantes las siguientes palabras han desaparecido de las publicaciones de arquitectura: Belleza, inspiración, magia, hechicería, encanto, y también serenidad, misterio, silencio, privacidad, asombro. Todas ellas han encontrado un hogar amoroso en mi alma, y si estoy lejos de pretenderles haberles hecho plena justicia en mi obra, no por eso han dejado de ser mi faro."
No puedo evitar que en estos días, la sombra de Barragán se transmute en forma musical, y habite sus espacios la hermosa serenidad de la L'Ombra Della Luce de Franco Battiato. 

Franco Battiato

Defiéndeme de las fuerzas contrarias,
en el sueño nocturno cuando no soy consciente,
cuando mi sendero se hace incierto.
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más.
Devuélveme a las zonas más altas,
a uno de los reinos de calma.
Es tiempo de escapar de estos ciclos de vidas.
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más.
¿Por qué los gozos del más profundo afecto
o del anhelo más sutil de pulso
sólo son la sombra de la luz?
Recuérdame lo infeliz que me siento
lejos de todas tus leyes.
¿Cómo no malgastar el tiempo que me queda?
Y no me dejes nunca más,
no me dejes nunca más.
¿Por qué la paz de ciertos monasterios
o la armonía vibrante de todos mis sentidos
sólo son la sombra de la luz?

14 dic 2012

Martes 18 nos vemos en el Aula

Abigail Hunt, Moleskine
Propongo quedar el martes en la Facultad para cambiar impresiones sobre la exposición "Cartografías" resolver las dudas que hayan podido surgir entre el trabajo en ella y nuestro propio proyecto personal, y como no... brindar por unas fructíferas vacaciones de Navidad. 
Se admite algún tipo de refrigerio siempre que cumplamos estos dos puntos básicos: 
1. Vestiremos todos de negro, con un detalle rojo.
2. Dejaremos el aula como los chorros del oro.

4 dic 2012

Exposición Cartografías: Caixaforum


Trabajamos en Caixaforun: exposición Cartografías
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Propuesta de trabajo asignatura de Proyectos

1.     El objetivo principal es utilizar la exposición como un modelo conceptual, como una estructura de modos de organización y relación de elementos heterogéneos bajo factores comunes.
2.     Como segundo objetivo comprender la importancia de los procesos de formalización que operan entre la extracción de datos de la realidad y los sistemas de representación por la que ésta se comunica.
3.     Adoptar una toma posición ante los diferentes sistemas de representación, cartografías, mapas o imágenes entendiendo que éstas nunca son inocentes.
4.     Acceder a un archivo de artistas y obras relevantes para nuestro campo.
5.     Redirigir algunos aspectos conceptuales de la exposición hacia nuestros propios intereses como artistas, en el ámbito del proyecto personal que presentaremos a finales de enero.

El proyecto será individual o colectivo máx. 2 integrantes, utilizándose el modelo básico explicado en clase.

Sistema de trabajo intensivo en la exposición 5 días hasta Navidad, para tutorías personalizadas cita previa en:


NIKI ROSATO, False Hope, 2011 Found Lottery Tickets, Performance 
http://www.nikkirosato.com/

IGNASI ABALLÍ
Lists (World Map 2009), 2010

WEB
www.ignasiaballi.net

11 nov 2012

Rapidez

Behind the Gare Saint-Lazare (1932) de Henri Cartier-Bresson. 

"Había una valla de madera alrededor de algunas reparaciones detrás de la estación de tren Gare Saint-Lazare. Justo yo estaba mirando por un hueco en la valla con mi cámara de fotos en el momento en que un hombre saltó"

El inmenso placer que te da la poesía de Penna; por ejemplo, esas dos pequeñas líneas que deja caer como si nada: 

"Quisiera vivir dormido / en el suave ruido de la vida".
 
En el catálogo de  Alighiero Boetti. Madrid: MNCARS, 2011

"Veo y me olvido,
escucho y me acuerdo,
hago y entiendo"
Proverbio Chino

"Un ave migratoria cruza el cielo...
Poco a poco, como tú,
me voy haciendo pequeño"
Haiku de Ueda Gosengoku.

De una tina (nacimiento)
a otra tina (muerte),
cuánta palabra inútil.
haiku de Kobayashi Issa (trad.: Orlando González Esteva) 

"¿Por qué cuando un ser muestra alguna o mucha necesidad de otro, éste se aleja? Gravedad"
Simone Weil


"Cuanto más viejo me hago más cuenta me doy de que hay que trabajar mucho para reproducir lo que busco: lo instantáneo. La influencia de la atmósfera sobre las cosas y la luz esparcida por todas partes"
Claude Monet, 1891
 Claude Monet:  
"La Catedral de Rouen y la torre d'Albane a pleno sol, armonía en azul y oro". 1894. Washington, National Gallery of Art

 Claude Monet:  
"La Catedral de Rouen, el portal en un día gris". 1892. Paris, Museo d'Orsay

Con las Catedrales Monet va más allá: (...) el edificio no es más que un fondo, una excusa , para mostrar al auténtico protagonista de la composición: la capacidad de la pintura de representar la cualidad dinámica de la luz y el ambiente, que es capaz de dar vida a algo tan pétreo e inanimado como la imponente fachada de la catedral gótica. Lo que Kandinsky había logrado descifrar en los almiares resulta aquí más que evidente.
Incapaz -por supuesto- de representar en un lienzo completo un cada fugaz instante, Monet trabajaba en ocasiones simultáneamente con varios lienzos, volcándose en uno en concreto cada vez que las condiciones de luz y ambiente se parecían a la del cuadro en cuestión. Imaginemos por un instante la situación: Claude Monet, instalado frente a la ventana de un segundo piso frente a la Catedral , trabajando frenéticamente con decenas de lienzos, a merced de que una nube pasajera, un fugaz rayo de sol, una niebla matinal le obligara a buscar -si es que existía- el cuadro en el que pudiera centrarse. Por supuesto, tal tarea debía resultar desesperante, y el propio pintor está a punto de abandonar su empresa. Pero no era Monet una persona que se rindiera fácilmente: " Más que nunca aborrezco las cosas que salen bien al primer intento" había escrito mientras trabajaba con los almiares . Monet llega incluso a concluir varios de los lienzos en su taller, fiándose de su portentosa memoria visual. Pero dos años después, la misión estaba cumplida, y Monet poseía ya tres decenas de capturas pictóricas de la Catedral. Así , y por primera vez en la historia de la pintura, se había logrado representar la cuarta dimensión , el tiempo, un logro reivindicado -sin embargo- por numerosas vanguardias varias décadas posteriores al maestro francés.



Olafur Eliasson
"si yo fuera un texto, sería solo un frase; compleja, cristalina y sorprendentemente simple"



"El espacio no existe simplemente en el tiempo, es del tiempo. A menudo, se olvida o se reprime esta condición, pues generalmente la sociedad occidental todavía está basada en la idea de un espacio estático no negociable.
A menudo, se olvida o se reprime esta condición, pues generalmente la sociedad occidental todavía está basada en la idea de un espacio estático negociable.
Cuando se piensa en los entornos como estables, tendemos a perder un sentimiento de responsabilidad por los medios en donde nos movemos. El espacio se convierte en un fondo para la interacción más que en un coproductor de interacción. Lo que se produce es, de hecho, un movimiento doble: la interacción del usuario con otra gente coproduce el espacio que, a su vez, es un coproductor de interacción.
Dado que en general los objetos no son estáticos, tampoco lo son las obras de arte. Éstas existen en múltiples relaciones inestables que dependen tanto del contexto donde se presentan como de la variedad de respuestas por parte de los visitantes.

Hago que la construcción sea accesible a los visitantes con el fin de incentivar su conciencia de que cada obra de arte es una opción o un modelo. De este modo, las obras de arte son sistemas experimentales y las experiencias de éstas no se basan en una esencia que se encuentra en las obras en sí, sino en una opción activada por los usuarios.
Estamos siendo testigos de un cambio en la relación tradicional entre realidad y representación. Ya no evolucionamos del modelo a la realidad, sino del modelo al modelo, al tiempo que reconocemos que, en realidad, ambos modelos son reales. En consecuencia, podemos trabajar de un modo muy productivo con la realidad experimentada como un conglomerado de modelos. Más que considerar el modelo y la realidad como modalidades polarizadas, ahora funcionan al mismo nivel. Los modelos han pasado a ser coproductores de la realidad.

En mi práctica artística trabajo tanto con modelos analógicos como digitales, modelos de pensamiento y otros experimentos que corresponden al modelo de una situación. Todo modelo muestra un grado diferente de representación, pero todos ellos son reales.
La idea de que el mundo consiste en un conglomerado de modelos conlleva un potencial liberador puesto que hace posible la renegociación de nuestros entornos. Lo que tenemos en común es que somos diferentes.
La naturaleza tiene un gran potencial pero es siempre a través de la cultura cuando más me interesa. Por eso me gusta la pintura del Renacimiento, que no entiende el paisaje sólo desde la naturaleza sino también desde la cultura, desde la posibilidad de que cuente cosas sobre nosotros. Me interesa su caracter procesual, espacial y experimental. Al final no me interesa tanto la naturaleza como el hombre."

Sueños de silicio”
La artista Sachiko Kodama diseña programas informáticos que envían señales a unos electroimanes que a su vez dibujan las formas en los ferrofluídos. Estas formas suelen ir acompañadas de la música de Philip Glass en algunas ocasiones. En otras ocasiones, sin embargo, son los sonidos de los espectadores u otros grabados por la artista los que crean el ritmo, ya que este tipo de líquidos siguen impulsos externos y se mimetizan a partir de lo que perciben en su entorno.

Infraleves, Marcel Duchamp




"Pantalones de pana - su ligero silbido (al andar) por roce de las 2 piernas es una separación infraleve indicada por el sonido. (¿no es un sonido infraleve?)"

"Puertas del metro - La gente que pasa en el último momento infraleve -"

"El calor de un asiento (que se acaba de dejar) es infra-leve"

El chasquido del papel del cigarro cuando arde tras una calada es un sonido infraleve. Son infraleves los movimientos de los dedos durante el sueño, aunque desde luego no todos y no para todos. También lo son las diferentes formas de creer la misma cosa para dos personas distintas o para la misma persona en dos momentos diferentes. Infraleve la silueta de la mano sobre un vidrio cuando no deja suciedad y desaparece, el filo de una hoja de papel y la diferencia de grosor entre dos minas de grafito del mismo-grosor.

¿Algún infraleve más?

4 nov 2012

Levedad: Saberse hierba

 Alfredo Omaña, Gran Suite Guadarrama, 2012

Chantal Maillard, en "El árbol de la vida" reflexiona sobre la necesidad de "saberse hierba". Clara lucidez  para todo aquello que tenga que ver con la vida, incluso para con el arte, cuando éste no es una impostura. Maillard cita la tesis sobre la vacuidad de Nishida y esto me recuerda la tesis de Calvino en Levedad, cuando habla de lo inmaterial de una descripción versus la pesadez del mundo:
 Alfredo Omaña, Gran Suite Santa Lucía, 2011

"El ecologismo, a pesar de sus buenas intenciones, no es el mejor camino. Se puede hacer, con respecto a él, la misma reflexión crítica que el filósofo japonés Kitarô Nishida hacía con respecto a la ética de los derechos humanos: tal tipo de ética, decía, es incapaz de resolver definitivamente los problemas del mundo porque pertenece a una forma dicotómica de entendimiento y los problemas entre los seres humanos han de resolverse a partir de la vacuidad, que permite comprender al otro desde lo mismo.

Proteger a la naturaleza, a los niños, a los animales, es la expresión del paternalismo propio de una tradición de control y dominio del medio que se ha desarrollado a partir de la idea bíblica de que la tierra está al servicio del hombre, ese ser que se autoproclama superior a todo lo que él mismo define como inferior. Del Génesis a la Tecnología hay una línea directa. […]

Hace falta una ecosofía en vez de una ecología. En vez de dominar y proteger, volver a sentir, a oír, a oler incluso, a comprender oliendo, a saber sintiendo. En vez de la pancarta "no tocar" en los "espacios protegidos", la invitación a la hierba, la educación del sentir, la religiosa invitación a saberse hierba y a pisarla como se pisa un templo en Oriente: con los pies descalzos. "No tocar" es la señal de alarma que aparta a los niños de su origen en vez de recordárselo, que nos hace peregrinar por nuestro mundo en un vehículo diáfano como aquellos autobuses en los que los turistas cruzan, como peces en un acuario, los parajes volcánicos de algunas islas. Turistas del mundo de fuera y del interior, nos vamos convirtiendo en depredadores que han olvidado la máxima de sus antepasados los viajeros: ir de lo propio a lo otro para ser lo que eres. […]

Lo propio: lo más común, el oikos . Oiko-sophía: saber de lo más propio, del hábitat, lo que nos pertenece no como posesión sino como propiedad, es decir, aquello a lo que ontológicamente pertenecemos. Sophia en vez de logos: saber en vez de conocimiento, integración en vez de discurso. […]
Christiane Löhr, 02_Drei_kleine_Kuppeln, 2007


29 oct 2012

Levedad: Andy Goldsworthy

Levedad
“Lo que intento hacer no es forzar, sino más bien permitir que las fuerzas existentes fluyan hacia la obra. Así que si llueve o hay viento, uso el viento, uso la lluvia, en lugar de tratar de oponer resistencia a estos elementos. Intento trabajar con ellos y ver los problemas como, en realidad, lo más interesante del trabajo. A veces, precisamente lo que ha sido un problema al hacer la obra, resulta ser lo más interesante. Y no debo combatirlo, debo trabajar con ello. Pero inevitablemente hay momentos en los que parece que estoy intentando forzar, y esos momentos son errores. Puedo ser muy perseverante —tengo que serlo para crear las obras—, pero la línea que separa la imposición de la perseverancia es muy fina. Y a veces simplemente no funciona como yo tenía pensado”

Andy Goldsworthy

Ríos y Mareas: Andy Goldsworthy y la obra del Tiempo

 

19 oct 2012

Foro Salidas Profesionales en BBAA

Agradezco a nuestra compañera Monica Yravedra la información sobre esta actividad "Foro Salidas Profesionales en BBAA" que tendrá lugar los días 22 y 23 en el Salon de Actos de la Facultad.Dado el interés de este foro modificamos el calendario de trabajo de nuestra asignatura, para poder asistir al mismo. El lunes 22 no habrá clase, pues asistiremos al foro.
La conferencia sobre la Levedad la pasamos al lunes siguiente, y el martes 23 trabajamos según lo previsto con la siguiente práctica de Especies de Espacios Perec.
Podéis consultar el programa del foro en la página de la Facultad:
http://www.bellasartes.ucm.es/


16 oct 2012

Especies de Espacios: La página

Hay un blog muy interesante a propósito de los diferentes tipos de espacios se denomina antartidas, especies de espacios
Está organizado con una estructura simple la palabra espacio +  series de palabras de naturaleza diversa que califican el espacio. Lo interesante es que relaciona las diferentes entradas con referencias a obras de artistas de todo tipo de medios y formatos y además, es un diario (os suena) que comienza el 22 de septiembre de 2011 con una entrada cada día. Aconsejo unos vagabundeos atentos por la nieve de sus páginas y un perderse por sus links.

Como ejemplo la primera del 22 de septiembre de 2011

espacio sonoro

“…estoy grabando el sonido de la pluma al escribirte mi tercera carta de despedida- Los guardare junto el sonido de las tripas de nuestro queridisimo amigo Fred, de las sombras cuando giran esquinas, de la cuerda floja de la funambulista Sonja Trakowsky,  del miedo antes de dormirme y de la nieve pisada con zapatos de color rojo…”

Mercè Soler “mail a un casi desconocido” 2010

10 oct 2012

Link a la carpeta de textos

En la carpeta de proyectos encontraréis los textos fundamentales con los que vamos a trabajar.
Acabo de subir el texto de Italo Calvino "El Conde de Montecristo" el lunes debatiremos en clase este texto y su relación con las metodologías proyectuales.
Subido también "Seis propuestas para el próximo milenio"

2 oct 2012

Especies de Espacios. Georges Perec

Como comentamos en la primera clase de proyectos os dejo un link al libro de Perec







Traigo aquí un texto de Matias Serra titulado Breve aproximación a la obra-vida de Georges Perec que puede servir para situar al autor y al "personaje" 


Cuentan sus amigos que cuando Perec se subía a un auto enseguida pegaba un grito. Quería que creyeran que se había agarrado un dedo con la puerta. La anécdota lo delata como un hombre dedicado a provocar efectos y lo cierto es que muchas de sus bromas más certeras –aquellas que dejó por escrito repercuten todavía hoy. De hecho, la sola obra de Perec bastaría para acabar con la última de las plagas bíblicas, la de los talleres literarios. Nadie probó caminos tan diversos con tan buenos resultados; nadie sería capaz de nutrir con tantas ideas gratuitas a un curso de “creatividad”. A pesar de que murió a los 46 años, Perec fue todos los escritores que quiso ser. Casi un artista conceptual, armó y desarmó los mecanismos de todos los géneros, y con tal de explorar nuevas zonas para la literatura saltó al vacío en más de una oportunidad: “Jamás tuve deseos de repetir en un libro una fórmula, un sistema o una manera elaborada en un libro anterior.”

Perec puede aparecer como una curiosidad, un fenómeno que podría recalar en el estante de los Entusiasmos Pasajeros, es decir alguien que más que lectores recluta simpatizantes. Pero sería una apreciación despistada y nadie puede dudar de que sobre el puñado que lo sigue ejerce una fascinación sin límite. Sobre todo cuando sus libros evocan para esos lectores una serie de momentos del pasado, puntuales, decisivos, y volver a ellos equivale a asomarse a un precipicio. Un vértigo similar al de oír la voz grabada de Perec, clarísima, recortada en el aire, que hace creer que los equipos utilizados eran los más avanzados (como si lo hubieran grabado después de la muerte.) Esa voz es, asimismo, otra manifestación de su estilo escrito. Sobre su prosa seca, puntuada por la lógica, apuntaba Italo Calvino: “Nadie más inmune que Perec al peor azote de la escritura de hoy: la vaguedad”.

Los libros de la buena memoria

La precisión fue un arma que acompañó a Perec toda la vida, para la escritura y la memoria. Perdió a su padre y a su madre –polacos de apellido Peretz– en la Segunda Guerra, y si quiso consagrarse a una misión ésta fue la de dejar huella, trazos, en lo posible imborrables: “Lo indecible no se agazapa en la escritura, es lo que la ha desencadenado mucho antes... Durante mucho tiempo esta ausencia de historia me tranquilizó: su sequedad objetiva, su evidencia ostensible, su inocencia, me protegían; pero ¿de qué me protegían sino precisamente de mi historia, de mi historia vivida, de mi historia real, de mi historia mía que, cabe suponer, no era seca, objetiva, ostensiblemente evidente ni evidentemente inocente?” Años después, el pasado lo premió con apariciones. El texto Me acuerdo le pasa lista a maravillosos detalles perdidos: “Me acuerdo de un inglés manco que le ganaba a todo el mundo al ping-pong en el Chateau D’Oex”; “Me acuerdo del tenis barba: contábamos los barbudos que pasaban por la calle: 15 por el primero, 30 por el segundo, 40 por el tercero y ‘game’ por el cuarto”; “Me acuerdo del baño que tomaba el sábado a la tarde al volver del colegio.” Enumerar, catalogar y clasificar hasta la hipnosis, la intoxicación: “Lo que me fascina en Verne es que es el único escritor, en fin, después de Rabelais, capaz de ocupar cinco páginas con nombres de peces sin que sea aburrido. Son las palabras que crean la historia, que la suscitan...” Listas y listas contra el olvido, la anulación. Retratar una mesa de trabajo, los lugares donde uno durmió, redactar la nómina de deseos que habría que cumplir antes de morir.

En un inventario de cosas que le gustan, Perec arranca así: “Me gusta: los parques, los jardines, el papel cuadriculado, las lapiceras, las pastas recién hechas, Chardin, el jazz, los trenes, llegar con tiempos a un lugar, el basilisco, caminar por París, Inglaterra, Escocia, los lagos, las islas, los gatos...” Entre las cosas que no le gustan: “las legumbres, los relojes de pulsera, los políticos, los directores, los subdirectores, los peluqueros, la publicidad, el té, Chabrol, Godard, la mermelada, la miel, las motos...” Este zurdo corregido que amaba los diccionarios fue paracaidista durante su servicio militar y trabajó diecisiete años de documentalista en un laboratorio: “Es esencial que un escritor se gane la vida fuera de la literatura.” Otra manía del autor de El gabinete de un amateur era coleccionar, sobre todo rompecabezas. Un pasatiempo que le recordaba a un autor apreciado: “Michel Butor dice algo así: la escritura es un rompecabezas al que le falta una pieza, y las piezas que existen son todos los escritores que te rodean, todo los que te iluminan, estimulan, y la pieza que falta, que va a acabar el juego, son los libros que harás vos mismo.” Entre sus libros favoritos se cuentan La verdadera vida de Sebastian Knight de Nabokov y El libro de la almohada de Sei Shonagon; el autor determinante para su vocación fue Malcolm Lowry: “Leo poco pero releo sin cesar, Flaubert y Julio Verne, Roussel y Kafka, Leiris y Queneau; releo los libros que me gustan y me gustan los libros que releo, y en cada ocasión con la misma fruición, relea veinte páginas, tres capítulos o el libro entero: una complicidad, una connivencia o, todavía más, un parentesco finalmente reencontrado.”

El peatón del espacio

El ping-pong fue su primera y última actividad física, pero lo que lo mantenía en forma era caminar. Para él, París es sinónimo de andar, perder el tiempo con sutileza. Existe una estrella que en su honor que lleva el nombre Perec, pero el espacio que a Perec le interesa es el cotidiano, puertas adentro y puertas afuera: “Colgué el cuadro en la pared para olvidarme que había una pared, pero olvidándome de la pared me olvido también del cuadro.” El extraordinario ensayo Especies de espacios viaja desde el rectángulo de una página en blanco, a una cama, una habitación, un departamento, un edificio, la calle, la ciudad. Perec no conoce París como la palma de la mano: París es las líneas de su mano. En la revista Télérama publicaba unos crucigramas geográficos, editados luego con el título Perec/rinations, para que los lectores redescubrieran Paris a través de itinerarios reglados por nombres de calles. Deambulaciones alfabéticas: emprender recorridos por calles que empiecen con A y así ir atravesando todo el abecedario, o sólo por calles que empiecen con la misma letra, o se recorran cronológicamente según la época de los personajes que llevan el nombre de la calle.


Perec se mudó decenas de veces dentro de la ciudad y su París, tal como lo filmó en Lugares de una fuga, aparece sembrada de sitios donde se ausentaba de clases: la infancia como un rosario de planos fijos. A Perec le interesan los lugares donde uno no debería estar, los lugares que nos eligen de legatarios. Escribió sobre la calle en la que vivió durante sus primeros años, rue Vilin, “donde corría con un dibujo de un oso en la mano.” Se embarcó en el proyecto de escribir durante doce años sobre doce lugares de París claves en su vida. Cada mes capturaba dos de estos lugares, uno de memoria y otro in situ. Con Tentativa de descripción de un lugar parisino buscó detallar desde una sola perspectiva, en solo dos días, la Place St. Sulpice. Ejercicios de observación con el fin de agotar un lugar “hasta que se torne improbable.” Otro modo de acercarse a lo que Perec llama lo infra-ordinario: “Cómo hablar de esas cosas comunes, más bien cómo acorralarlas, cómo hacerlas salir, arrancarlas de la corriente en la que permanecen sumergidas, cómo darles un sentido, una lengua: que hablen finalmente de lo que existe, de lo que somos... Me importa mucho que parezcan triviales y fútiles: eso es lo que, precisamente, las vuelve tanto más esenciales que otras a través de las cuales hemos intentado vanamente captar nuestra verdad.” Incluso contra su voluntad, Perec es de esos escritores que enseñan muestran, orientan un modo de mirar, de estar presente: “Vivir es pasar de un espacio a otro haciendo lo posible por no darse un golpe.”

El programa Perec

Es en Especies de espacios donde anuncia el proyecto de su gran novela, La vida instrucciones de uso: “Me imagino un inmueble parisino al que le arrancaran la fachada.” Construida como un puzzle, la obra describe cada una de las piezas a la vista y quiénes viven en ellas. La obra, que le llevó nueve años de trabajo, es todo lo que se ha dicho: una invención extravagante, irónica, erudita, minuciosa al extremo, plagada de fabricantes de juguetes, antropólogos incomprendidos, botanistas fracasados, ciclistas intranquilos, aviadores argentinos. Como a sus personajes, Perec se exige destrezas casi imperceptibles.

Lo que más se recuerda de Perec es, además, su primera novela, Las cosas, que se aventura hacia los objetos y sus usos, “la fascinación de las cosas, la presión que ellas ejercen”. La ropa, los muebles, la mitología de lo diario alimentada por sucesivas visitas de Perec a los seminarios de Roland Barthes. Y han sido muy festejadas sus novelas-proeza, La disparition (traducida como El secuestro), escrita sin la letra “e”, la más común del abecedario francés, y Les Revenentes, escrita con esa sola vocal y ninguna otra. En Las cosas y La vida... Perec recurre al préstamo sistemático de otros autores. Su biógrafo y traductor David Bellos señala: “Tomar oraciones de un gran escritor es un acto desafiante; crea un desafío para el lector y a la vez es una expresión de modestia. ¿Por qué un escritor no puede trabajar como un carpintero, construyendo un objeto terminado a partir de piezas preparadas para él de antemano?” Un hombre que duerme, de hecho, es una novela collage, armada con frases de Melville, Kafka, Joyce, Barthes, Diderot. Inocente declarado, Perec revela el procedimiento –la traducción por otros medios– con sus palabras: “Verne y Roussel no hacían sino recopiar fragmentos de las enciclopedias... Obviamente, mi objetivo no es rescribir Don Quijote, como el Pierre Menard de Borges, pero sí quiero, por ejemplo, rehacer mi Melville favorito, Bartleby. Como es imposible escribir un relato que ya existe, no quería hacer un pastiche sino escribirlo otra vez, digamos, hacer un Bartleby diferente, bueno, en realidad, el mismo Bartleby, excepto que un poco más… como si yo mismo lo hubiera inventado.”

La tienda oscura es otra clase de apropiación, ya que reúne sueños, y se lee como una suerte de educación oblicua, sentimental. Perec también escribió un breve y exquisito tratado sobre el Go, juego japonés que admiraba por su mezcla de “suavidad impasible y sutileza feroz”, y cuyos misterios Perec comparaba con los de la escritura. No se debería omitir el prodigioso W, o el recuerdo de la infancia, mitad autobiografía, mitad novela de aventuras. Y su última novela, un policial inconcluso, que se originó a partir del desafío de escribirla en 53 días, el tiempo que le llevó a Stendhal redactar La cartuja de Parma. Algunos lo consideran un maestro posmoderno, pero que nadie le tema a una irrupción cutánea: nada de lo que Perec escribió huele a flor de invernadero.
(...)

El domingo 11 de mayo de 1958 Perec entró a un cine a ver Las vacaciones de Monsieur Hulot de Jacques Tati. Quince años después probó sus primeras armas en el cine, que nunca dejó de ser bastante más que una distracción: “Me acuerdo de Robert Mitchum cuando dice “Children...” en la película de Charles Laughton La noche del cazador.” Casi cuarenta años más tarde, el biógrafo de Perec se convirtió en el biógrafo de Tati, que también murió en 1982.
Y empezaron así a asomar las correspondencias: “hay un aire de familia entre los juegos que los oulipianos hacían con palabras, y las restricciones formales y el finísimo humor del arte cinematográfico de Tati.”

Hay notables casos de escritores cineastas en Francia: Cocteau, Duras, Robbe-Grillet. Perec filmó Un hombre que duerme, Relatos de Ellis Island y Lugares de una fuga, pero su ojo no estaba puesto en enlistarse en ese elenco.
Es probable que su muerte haya marcado un punto de no retorno en la literatura francesa. Para cerciorarse, el lector levanta la vista. Pasa un hombre con un portafolio mal cerrado. Pasa una joven con un libro asomando de la cartera. Pasa el autor, es él, Georges Perec, con aspecto de no haber dormido.

23 sept 2012

Otros paisajes



Metrópolis estrena Carta Blanca a…, una nueva serie dentro de su programación habitual en la que invita a comisarios o coleccionistas, entre  otros profesionales del arte contemporáneo, a presentar una serie de obras seleccionadas exclusivamente según sus criterios y gustos personales.
El primero de ellos es Rafael Doctor Roncero (Calzada de Calatrava, Ciudad Real, 1966). Historiador del arte, fue responsable de la programación del Espacio Uno del MNCARS entre 1997 y 2000 y dirigió el MUSAC de 2002 a 2009. En la actualidad trabaja como comisario free lance y reside en Madrid.
Rafael Doctor ha optado por un enfoque temático que refleja la renovada presencia del paisaje en la creación contemporánea. Repasa, bajo el título Otros paisajes, la obra de 11 autores españoles que, desde la pintura, la escultura, el video, el collage, la fotografía o el dibujo redefinen uno de los géneros esenciales del arte.
“El paisaje actual es un paisaje reinventado a través de la diversidad de medios que hoy cuenta la paleta del artista ya partan estos de su confrontación directa con la realidad o de su elaboración en el estudio. En un mundo esencialmente urbanita, el artista contemporáneo realiza diferentes acercamientos hacia un exterior que resiste sus constantes intervenciones, hacia una naturaleza que aún es capaz de dar respuestas a sus preocupaciones y que sigue siendo en buena medida lugar de inspiración para sus obsesiones.” (Rafael Doctor)
Los acercamiento a la hora de pensar e interpretar el paisaje son absolutamente diferentes y van desde la visión apocalíptica que plantea Marina Núñez o Santiago Talavera, la visión romántica a partir de la idea de sublime de las fotografías de José Ramón Aís y en cierta medida en las pinturas de Jose Luís Serzo, el acercamiento humanista de Pierre Gonnord, la visión sobre espacio y el tiempo que aparece en las obras de Lois Patiño, la visión melancólica que producen los paisajes nocturnos que generan los entornos urbanos presente en la obra de Miquel Llonch,  el acercamiento crítico social haciendo uso de la historia de la representación humana que hace el colectivo MR, el acercamiento a través del imaginario familiar o de la memoria que hace Enrique Marty o la generación de paisajes siempre artificiales de Philip Frolich, junto con la posibilidad de generar imágenes de una manera mixta utilizando las técnicas tradicionales con las nuevas técnicas digitales que se aprecia en la obra de Juan Palomares.
http://www.rtve.es/television/20120518/otros-paisajes/528397.shtml

ATOPÍA. Arte y ciudad en el siglo XXI

http://www.rtve.es/television/20101213/atopia-arte-ciudad-siglo-xxi/385996.shtml


Metrópolis ofrece un recorrido por la exposición ATOPÍA, una de las numerosas actividades dedicadas a lo largo de 2010 a la Ciudad, que se pudo ver entre febrero y mayo en el CCCB (Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona).
A lo largo de la primera década del siglo XXI la Ciudad ha estado en el punto de mira de sociólogos y políticos, de especuladores y activistas, de ciudadanos y artistas. ATOPÍA, compuesta por obras de unos 40 artistas producidas desde el cambio de milenio, abordó el malestar del individuo frente a la ciudad actual   centrándose en una urbe que pierde sus funciones como espacio de encuentro y realización para convertirse en un espacio de pérdida y fracaso.
La exposición comisariada por Josep Ramoneda e Iván de la Nuez estuvo estructurada en cuatro apartados temáticos entre los que medían tres transiciones.
La ciudad vs. el habitante describe la tensión entre el artista/individuo y la ciudad con obras de Anothermountainman (Hong Kong), Loulou Cherinet (Estocolmo), Tim Eitel (Berlín/Nueva York),  Carey Young (Londres), Emeka Okereke (Lagos/Paris), Mona Vatamanu y Florin Tudor (Bucarest), George Osodi (Londres/Lagos) y Andreas Gursky (Düsseldorf). En foto y videoperformances, pinturas y fotografías se muestran las rutinas urbanas, así como el aislamiento y las agresiones a las que se encuentran sometidos los habitantes.
La ciudad sin habitante presenta la ciudad como una entidad postcapital, abstracta y fantasmal. En este apartado compuesto por fotografías, esculturas e instalaciones de Baltazar Torres (Oporto), Montserrat Soto (Barcelona), Garlos Caraicoa (Madrid/La Habana), James Casebere (Fort Greene, Brooklyn), Tiffany Chung (Saigón) y Dionisio González (Sevilla) vemos una after city que ha decretado la victoria del urbanita sobre el ciudadano, de la multitud sobre la comunidad, del vacío sobre la soledad y de la expulsión sobre la acogida.
El habitante sin la ciudad habla de la pérdida de las señas de identidad, de cómo estas se han convertido en causa de exclusión, de separación y de marginación. Las fotografías, esculturas y videos de Adrian Paci (Milán), Philip-Lorca diCorcia (Nueva York), Vanessa Beecroft (Los Ángeles/Nueva York) y Erwin Wurm (Viena) nos muestran sujetos petrificados, seres indiferentes, actores sin rostro.

Apoteosis urbana, finalmente, enfoca la ciudad como espacio posible: la contracultura, la fiesta y el ruido como remedios contra el desasosiego y la tensión, contra la violencia y la indolencia, la basura y la opulencia. Las fotografías y videos de Alexander Apóstol (Caracas/Madrid), David Lachapelle (Nueva York), Daniel Canogar (Madrid), Rogelio López Cuenca y Elo Vega (Barcelona) proponen una mirada algo mas lúdica, a veces incluso un poco frívola sobre la ciudad.
En las transiciones entre los apartados se pueden ver dos fotografías y una escultura de Carlos Irijalba (Nueva York) así como videos de Sergio Belinchón (Berlín) y José Antonio Hernández Díez (Barcelona).